En la conferencia que dio hoy en el Albergue del Arte, el periodista de La Jornada, Jaime Avilés, hizo un recuento de los grandes problemas que vivimos los mexicanos, situaciones que se han vuelto muy graves y peligrosas para todos.
Aunada a la crisis económica y política, vivimos una crisis social, una crisis de gobernabilidad y una crisis de inseguridad.
Ante estas crisis el gobierno espurio no hace sino empeorarlas. Continúa la concesión a las trasnacionales de los recursos naturales, la Reforma Laboral pretende acabar con los derechos de los trabajadores, y el pelele Calderón, con su guerra a favor del narco, no ha hecho sino recrudecer el problema e incrementar exponencialmente el poder del crimen organizado.
Además del número creciente y constante de muertos de todos los días, del peligro que es ya vivir en algunas ciudades del norte, del absoluto control que tiene el narcotráfico de grandes territorios, el ejército está llegando a niveles inconcebibles de desprestigio, corrupción y debilitamiento.
El ejército está infiltrado por la delincuencia y se la ha dado manga ancha para cometer actos atroces. Tenemos muchos lamentables ejemplos de personas inocentes que han sido asesinadas.
En México estamos en una situación cada vez más parecida a Colombia, en donde el ejército combate tanto a la guerrilla como al narcotráfico, donde la presencia de los militares en las calles es para reprimir los movimientos sociales y donde el narcotráfico no ha disminuido, sino aumentado.
Desde que comenzó la guerra del pelele de Calderón a favor del narco, este ha aumentado.
Nosotros tenemos que exigir que esta guerra termine, porque no es contra el narcotráfico, sino contra nosotros.
Avilés también preguntó ¿a qué nos vamos a enfrentar los ciudadanos en 2012?
Por un lado, la mafia que controla al país está decidida a imponer a otro pelele en la presidencia.
Existe un claro acuerdo entre los empresarios que monopolizan las grandes riquezas y los cárteles de la droga, coludidos con los gobernantes, para hacer todo lo necesario para imponer a quien resguarde sus intereses.
Asimismo preguntó: es muy bueno que los ciudadanos nos estemos organizando en este movimiento de resistencia civil pacífica, pero ¿es suficiente?
¿Qué tenemos que hacer para lograr configurar esta fuerza enorme?
Nosotros tenemos soluciones, tenemos un proyecto alternativo de nación, tenemos lo mejor del país y somos millones.
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